Cada noviembre, Madrid rinde homenaje a su patrona, la Virgen de la Almudena. En los días previos a la festividad principal, la catedral de Santa María la Real de la Almudena organiza un triduo, tres días de cultos en su honor.
El 9 de noviembre, la ciudad se sumerge en un ambiente festivo. En la Plaza de la Almudena se celebra la misa principal, tras la cual la imagen de la Virgen es llevada en una colorida procesión hasta la Plaza Mayor y de vuelta. Por el camino, habitantes y visitantes se encuentran con ofrendas florales, música de conciertos clásicos e impresionantes números de baile.
La dulce tradición madrileña atrae especialmente la atención. Las pastelerías locales preparan la famosa Corona de la Almudena, un postre que simboliza la festividad y que está al alcance de todos los que lo deseen. Al mismo tiempo, el Ayuntamiento de Madrid organiza diversas actividades: desde clases magistrales de baile hasta degustaciones y espectáculos festivos en la plaza.
Este día une a creyentes y turistas, convirtiendo el centro de Madrid en una auténtica magia navideña incluso antes de que llegue el invierno. Todos pueden acercarse a las tradiciones, disfrutar del arte y saborear la auténtica fiesta madrileña.