Lejos de plantear un recorrido convencional, la exposición propone una travesía emocional. Vicent ordena las escenas marinas de Sorolla —desde L’hora del bany y El balandret hasta L’arribada de les barques o Pescadora amb el seu fill— para construir un relato que mezcla memoria, observación y sensibilidad mediterránea. Cada sala funciona como una cámara de resonancia donde la luz de Sorolla dialoga con la prosa del escritor, iluminando temas comunes: la infancia junto al mar, la vida en los pueblos costeros, la mística de la luz levantina y la presencia inagotable del Mediterráneo como identidad compartida.
La exposición, estructurada en cuatro capítulos («El subconscient està ple d’algues», «Un drama naturalista sota la llum del Mediterrani», «Estiuejants burgesos al Cabanyal» y «Al mar de Xàbia»), revela cómo el mar no es solo un escenario para Sorolla y Vicent, sino un lenguaje moral y estético.
Acompañada de un catálogo que recoge el texto íntegro escrito por Vicent para la ocasión, la muestra convierte el Palau Martorell en un puerto donde confluyen dos formas de mirar un mismo horizonte. Una invitación a contemplar la obra de Sorolla desde una sensibilidad renovada y profundamente literaria.