El mercadillo se instala en los edificios más exclusivos y emblemáticos de cada ciudad. Se creó en Madrid en plena crisis para estimular las ventas de las empresas creativas. Este nombre no fue elegido por casualidad. A los madrileños les apodan «gatos», así que el nombre del mercado es apropiado.
El Mercadillo del Gato reúne a más de 50 marcas relacionadas con el mundo de la moda, los complementos, la decoración, el diseño y la gastronomía. Aquí hay de todo: desde las telas más brillantes e innovadoras hasta los accesorios más exquisitos, pasando por joyas y bisutería de acuerdo con las últimas tendencias.
El mercadillo ofrece una experiencia de compra diferente en un entorno único: marcas que no siempre tienen una plataforma física y la oportunidad de encontrar artículos diferentes a los que ofrecen los canales de compra convencionales. Es el lugar perfecto para descubrir marcas difíciles de encontrar en los supermercados.
El mercadillo es de carácter temporal. Así que ¡no te lo pierdas!