Bivac propone explorar qué hay más allá de los finales a través de danza, música, performance, literatura y pensamiento. El baile como resistencia, el deseo como brújula, la evasión como refugio y el encuentro como gesto político. Todo ello articulado en torno a cuestiones que interpelan directamente a una generación: ¿qué nos ofrece el after?, ¿qué le pedimos?, ¿por qué nos aferramos a él aunque ya no quede música?
Concebido por el CCCB, La Sullivan y un grupo de diez jóvenes, Bivac se ha consolidado como un espacio radicalmente abierto, donde lo artístico y lo crítico se confunden y el público se convierte en cómplice de un experimento colectivo.
El programa completo y las entradas estarán disponibles en septiembre, pero algo está claro: Bivac 2025 no promete respuestas, sino la posibilidad de habitar juntos el desconcierto del después del después. Un festival que convierte la incertidumbre en motor y el after en metáfora de nuestra época.