Hugo Chan nos dejó un «kebab sin kebab» de primera categoría. Ahora, el famoso plato de comida callejera turca ha alcanzado nuevas cotas de excelencia con este revolucionario proyecto.
Ya casi todo el mundo en Madrid conoce su kebab gourmet en brillante papel dorado envuelto con pegatinas de «dosmilero». Se trata de una versión modernizada de la receta, elaborada con pan de pita al estilo griego, con finas lonchas de pollo de la zona o ternera de Discarlux, aderezadas con diversas salsas, incluida la mexicana. Lo que también es revolucionario es que los kebabs no se preparan en un torno, sino que se cocinan al carbón en una parrilla robata japonesa. Además, las patatas fritas se sustituyen por patatas de bolsa, que, según Alberto de Luna, están «muy ricas».