Durante el reinado de Isabel II, los salones decorados a semejanza de la Alhambra eran una obligación. Entre 1881 y 1884, el arquitecto y artista Manuel José de Laredo construyó este palacio. Como alcalde de la ciudad, quiso establecer aquí su propia residencia. Al diseñar el palacio, Laredo combinó todos los estilos arquitectónicos imaginables e impensables: tomando como base el neomudéjar, añadió motivos pompeyanos y elementos modernistas, detalles orientales, terrazas, miradores y torres.
También es encantador el pequeño jardín que nos recibe en el actual Museo Canceriano, con su estanque, puente y ruinas arqueológicas halladas en esta zona de Alcalá. El Salón de los Reyes alberga uno de los planetarios más antiguos del mundo: se trata de un firmamento del siglo XIV conservado en su forma original. En el palacio hay un minarete, una sala árabe, un salón de espejos y el lema grabado de la dinastía nazarí: «Sólo Dios vence».
La exposición dedicada al cardenal Canceriano se compone de documentos y otros monumentos de la época.