Este invierno, el nuevo espacio urbano NUGA Castellana se ha convertido en uno de los lugares navideños más destacados de Madrid. El diseñador Juan Avellaneda ha decorado el complejo como un bosque luminoso con flores artesanales de diseño propio, convirtiéndolo en un espectacular recorrido para pasear y hacer fotos.
La instalación abarca las zonas clave del complejo, desde las entradas hasta el espacio gastronómico El Callejón, y crea una imagen visual inmersiva y coherente. Después de las fiestas, los árboles se trasplantarán, lo que subraya el enfoque ecológico del proyecto.