En otoño, todas las miradas se dirigen hacia estas bolitas de relleno. Se han convertido en un símbolo del Día de Todos los Santos, un dulce ligado a la tradición desde hace siglos.
Existe la leyenda de que si se come un bañuelo, se puede salvar un alma del purgatorio. Se desconoce el origen exacto de estos dulces, pero hay referencias a ellos en el recetario romano De Agri Cultura, de Catón el Viejo, escrito en el siglo II a. C.
Si quieres disfrutar de los mejores buñuelos de Madrid este otoño, echa un vistazo a nuestra lista.
Es una acogedora pastelería familiar que lleva desde 1936 deleitando con dulces a los madrileños. Ahora, la especialidad de temporada más popular son los buñuelos. Se trata de una receta tradicional que se ha transmitido durante 7 generaciones de pasteleros. Cada bollo se elabora cuidadosamente a mano con los mejores ingredientes.
C/ del Conde de Peñalver, 42Es una de las panaderías más antiguas y tradicionales de la capital. Aquí puedes comprar una receta centenaria que se ha perfeccionado durante todo este tiempo. Ahora puedes saborear el resultado relleno de nata, chocolate o crema. Pero también hay tendencias modernas, como el «cabello de ángel» seguido de café, trufa o boniato, el «marron glasé», Baileys, frambuesa o naranja con chocolate.
C/ de Bordadores, 9Aquí todos los días se utiliza masa fresca para elaborar exquisitos y delicados buñuelos con los mejores ingredientes. Las de nata y chocolate son las más populares, pero también las hay con trufa, crema irlandesa, las clásicas «cabello de ángel» y «marca de champán».
C/ del Prof. Waksman, 8Aquí podrás degustar los buñuelos de viento más frescos, ya que se preparan de la mañana a la noche todos los días con materias primas de la más alta calidad, chocolate y mantequilla puros, así como nata fresca. Y el relleno es sorprendentemente variado: nata, chocolate, crema, dulce de leche, cabello de ángel, café y avellana.
Prta del Sol, 8El local ya se ha convertido en embajador del turrón en Navidad y de los buñuelos de viento en otoño. Estas bolitas crujientes no dejarán indiferente a nadie y asoman juguetonas por un escaparate lleno de dulces.
Carr.ª de San Jerónimo, 30Otro lugar popular donde no faltan bañuelos. Preparan cada producto con sumo cuidado, y en octubre y noviembre son muy solicitados aquí. No es de extrañar, ya que se puede degustar una receta elaborada desde hace más de 90 años con los mejores productos de otoño y rellena de diversas cremas caseras.
C/ de Velázquez, 59Esta panadería ha abierto hace poco, pero justo a tiempo para llenar los buñuelos de otoño y convertirse en un referente de la zona. Su selección es sorprendente, pero los más populares son los de nata, chocolate, café y Oreo, y la propia masa tiene un toque de anís.
C/ de San Germán, 12Se trata de otra pastelería centenaria que elabora dulces clásicos tradicionales de temporada. En la víspera de Todos los Santos, las estanterías rebosan de buñuelos de viento rellenos de nata, crema, chocolate, cabello de ángel, café y boniato.
C/ del Pozo, 8Esta panadería sirve algunos de los buñuelos de viento más delicados de la capital. El chef-pastelero vigila de cerca cada producto y el cumplimiento de las recetas. Gracias a él salen tan aireados y no demasiado dulces. Además, los sabores de los rellenos aquí son numerosos y hacen que uno se pregunte qué elegir.
C/ de Alcalá, 77Es otro auténtico testigo de la historia centenaria de la capital. La encantadora tienda con salón de té lleva abierta desde 1855 y fue inaugurada por el confitero personal de la reina María Cristina, Dámaso Maza. Desde entonces, las estanterías se han llenado de dulces de recetas tradicionales españolas. Y, por supuesto, en otoño destacan los buñuelos de viento rellenos de nata, crema, chocolate, café, boniato y cabello de ángel. También se pueden degustar con té o café en el salón.
C/ Mayor, 10El estricto cumplimiento de las recetas tradicionales cautiva a todo el mundo en octubre y noviembre. Su especialidad es la técnica de Ricardo Vélez, que en 2021 revisitó una receta centenaria y la llevó al siguiente nivel. Han trabajado durante mucho tiempo en las proporciones y la temperatura perfecta del aceite para que los buñuelos salgan perfectos. Destacan las opciones con nata, vainilla, café y avellanas.
Carr.ª de San Jerónimo, 8Dirigido por el pastelero José Fernández, este lugar está considerado uno de los más creativos en el campo de los dulces tradicionales. Crea diferentes colecciones de torrijas, turrones y roscones. Los buñuelos aquí van desde los clásicos cabello de ángel, marrón glacé, nata, chocolate, trufa y crema hasta los innovadores a base de licores y bebidas: apperol, Martini, negroni, vermut, cerveza y bitter.
C/ de Narváez, 63Otra hermosa pastelería que tienta a todos con sus olores. En otoño, los buñuelos de viento cobran protagonismo con una receta tradicional y una gran selección de rellenos. Puedes encontrar clásicos como bollos con cabello de ángel, boniato y calabaza, con nata, chocolate y crema pastelera.
C/ de San Onofre, 3Este es el lugar más afectuoso para estar. Aquí todos los platos se elaboran con productos ecológicos, sin azúcar ni harina refinada. Los buñuelos se elaboran artesanalmente con materias primas seleccionadas, ecológicas y sostenibles.
C/ José Ortega y Gasset, 92Es una tienda de golosinas realmente emblemática que fue salvada por Oriol Balaguer. Sin detenerse en la carta básica, ha perfeccionado la receta tradicional centenaria de los buñuelos de viento para convertirlos en unos de los mejores de la capital.
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