No hay escenarios montados ni poses calculadas. En la muestra «Madrid Icono Pop», 1964–1979, lo que manda es la espontaneidad. La exposición, abierta al público con entrada libre en la Sala Cristóbal Portillo (El Águila), recorre el lado más humano de la ciudad durante dos décadas clave, a través de instantáneas que capturan fragmentos de vida real con un estilo vibrante y lleno de movimiento. El autor de esas imágenes es Gianni Ferrari, un fotoperiodista italiano que documentó con naturalidad escenas privadas de figuras públicas. Aquí no vemos solo a Lola Flores o a Audrey Hepburn, sino a personas en instantes reconocibles: una madre regañando, una actriz saliendo del coche, una joven hojeando revistas. Es Madrid observado desde dentro.
Junto a las fotografías, se exhiben prendas de diseñadores como Balenciaga, Pedro Rodríguez o Givenchy, además de revistas originales, bocetos de moda y materiales audiovisuales que ayudan a reconstruir el contexto de una ciudad que empezaba a mirar hacia fuera. La muestra no idealiza: retrata. Organizada por la Subdirección General de Patrimonio Histórico y comisariada por Esperanza García Claver, la exposición estará disponible hasta el 21 de septiembre. El acceso es libre. Una oportunidad para descubrir un Madrid que existía más allá del escaparate, justo donde comenzaban las historias personales.