Eva Lutz presenta una nueva forma de ver el arte. Se trata de un recorrido cronológico por toda la vida creativa de la artista. La muestra incluye una selección de obras, algunas de las cuales nunca se han expuesto antes y otras se han reconstruido para la ocasión.
Lutz creó sus obras en la década de 1970, un periodo que la artista ha calificado de «papismo elemental». Durante este periodo, tuvo lugar en Estados Unidos y Europa un proceso de desarrollo del arte antiformalista. La idea es que el proceso de creación es mucho más importante que el resultado final. Las obras se centran en la literalidad de los materiales.
En sus obras, la artista cuestiona la visualidad contemporánea, la excesiva fascinación por las imágenes y las influencias de la cultura digital. Intentamos ver lo que se oculta en los rincones ciegos de nuestra visión. Lutz llama a esto «mirar por el rabillo del ojo». Esto le permite centrarse en materiales fluidos o en los hilos y sus nudos, y nos anima a pensar sin entidades fijas.