El edificio Legazpi fue originalmente un matadero municipal diseñado a principios del siglo XX por el arquitecto Luis Bellido. Dejó de prestar servicio en 1995 y, 20 años más tarde, se le dio un uso cultural. Así comenzaron una serie de obras arquitectónicas para adaptar el edificio a eventos culturales.
Hoy, Matadero Madrid tiene una segunda vida, orientada hacia un lugar de encuentro y un espacio para la creatividad y el pensamiento. Acoge un amplio programa de exposiciones, representaciones teatrales, festivales y otros muchos actos culturales.
La organización invita a todos a sus itinerarios, en los que cuenta su historia a través de una serie de visitas guiadas en las que se puede conocer uno de los proyectos más icónicos de la ciudad de Madrid desde diferentes perspectivas: desde la construcción del edificio como matadero municipal hasta su uso actual.