Leo Rivera nos presenta su creación. El secuestro nos hace reír de nosotros mismos y de los acontecimientos. Se trata de tomar cartas en el asunto cuando quienes deberían velar por nuestro bienestar nos ignoran.
Paco está desesperado: está a punto de perder su trabajo porque el mercado donde ha trabajado toda su vida está a punto de cerrar. Tiene una hija, una hija pequeña y ahora un futuro incierto. Entonces decide secuestrar al hijo del ministro, cuyo visto bueno es necesario para el cierre. Pero llega su hermana y su cuñado. Y la situación se complica. Esta obra cómica pero profunda trata sobre la gente de a pie y los políticos, sobre una familia enamorada y sobre no rendirse.