Hoy 23 y mañana 24 de julio a las 20:00 h, el público podrá vivir una experiencia musical diferente: un concierto al aire libre donde el escenario es el agua y el protagonista, un piano flotante que se desliza al ritmo de boleros, sones, chachachás y composiciones propias. La propuesta fusiona arreglos neoclásicos con raíces tradicionales cubanas, en un formato íntimo y profundamente visual.
El espectáculo cuenta con la dirección artística del músico cubano Edgar Olivero, acompañado por la bailarina asturiana Mónica Cofiño, cuya danza dialoga con las melodías desde la orilla. Juntos crean una puesta en escena que se mueve entre la música en vivo, el movimiento corporal y el reflejo de la naturaleza al atardecer.
Las entradas están disponibles por entre 8 y 18 euros, con apertura de taquilla desde las 19:00 h. Como el embalse no cuenta con asientos, se recomienda llevar cojín, toalla o silla, y ropa adecuada en caso de lluvia. Una experiencia efímera, delicada y profundamente sensorial que solo se podrá disfrutar hoy y mañana.