En sus primeros años, la sala era un cabaret y acogía diversos espectáculos. Con el paso de los años se fue convirtiendo en sede de numerosos espectáculos con música en vivo. Fue en los años 80 cuando la sala Apolo comenzó a dar conciertos con diferentes bandas y artistas en solitario, convirtiendo el espacio en un escenario clave para la música. El establecimiento se diferencia por su arquitectura, combina elementos del modernismo con estilo clásico que acoge a todo el público.
La sala Apolo brinda al público una programación muy variada, desde conciertos rock, pop, indie hasta eventos de música electrónica. Es un espacio esencial para que artistas nuevos impulsen sus carreras musicales, a la vez que el público disfruta de la buena música. No solo es un lugar para disfrutar de la música, es un espacio para disfrutar de una experiencia única en la ciudad de Barcelona.