Desde su apertura, ha sido visitado por turistas que buscan disfrutar de la auténtica cocina catalana. El bar se destaca por sus tapas, que van desde las clásicas patatas bravas hasta deliciosas croquetas caseras, todo elaborado con ingredientes frescos y de calidad.
El ambiente del Bar Ramón es cálido y familiar, decorado con fotos antiguas y recuerdos de la historia de la ciudad. Los camareros son amables y siempre prestan el mejor servicio, estando dispuestos a recomendar los mejores platos de la casa. Además, el bar ofrece una selección de cervezas artesanales y cócteles que combinan perfectamente la experiencia gastronómica.
Uno de los momentos más destacados es cuando los visitantes pueden disfrutar de un aperitivo tradicional acompañado de aceitunas y frutos secos a la llegada del lugar. Bar Ramón no solo es un espacio para comer, sino también un espacio para disfrutar en familia o con amigos . Sin duda, es un bar característico de la ciudad si quieres disfrutar de la comida catalana.