Lo que hace que Casa Lleó i Morera sea tan especial es su fachada exquisitamente decorada, que presenta una mezcla de elementos arquitectónicos y decorativos que reflejan la influencia del modernismo, el gótico y el renacimiento. La fachada está adornada con esculturas, mosaicos, vitrales y detalles ornamentales que la convierten en una verdadera obra de arte.
En su interior, la casa alberga una serie de espacios impresionantes, incluyendo un vestíbulo majestuoso, un salón de música y un espectacular patio de luces con una claraboya de vidrio que baña el espacio con luz natural. Cada rincón de la Casa Lleó i Morera está cuidadosamente diseñado y decorado, lo que la convierte en una visita obligada para los amantes de la arquitectura y el arte.
La casa ha sido restaurada meticulosamente y hoy en día alberga oficinas y espacios privados, por lo que no siempre está abierta al público. Sin embargo, en ocasiones especiales, como el Día de Sant Jordi, la casa permite visitas para que los visitantes puedan maravillarse con su belleza y esplendor.