En el siglo XVII, en el lugar de este singular edificio había una masía. Durante el siglo XIX, se construyó la actual torre que muestra rasgos arquitectónicos propios del barroco catalán. Su diseño original refleja la influencia estilística de la época y la riqueza artística de la arquitectura de aquel período. Este lugar, testigo de un episodio trágico durante la Guerra civil española, alberga actualmente un centro de exposiciones y actividades culturales.
Su fachada conserva los impactos de proyectiles de la guerra, una huella que recuerda su pasado. Dentro de sus muros, se realizan exposiciones temporales, eventos culturales y actividades educativas que invitan a explorar su historia y a disfrutar del arte y la cultura contemporánea en un entorno único y cargado de historia.