Una ola de frío recorre Catalunya desde la madrugada del jueves 20 de noviembre, provocando un descenso generalizado de las temperaturas que se mantendrá hasta el fin de semana. Las mínimas y máximas caen en todo el territorio, mientras los servicios meteorológicos activan alertas por frío extremo y posibles nevadas.
Según Meteocat y AEMET, la nieve podría aparecer en la cara norte del Pirineo, donde la cota baja hasta los 1 200 e incluso 1 000 metros. El Vall d’Aran también podría recibir precipitaciones en forma de nieve en las próximas horas.
En Barcelona, el termómetro oscila entre los 6 grados de mínima y los 11‑12 de máxima, cifras que contrastan con el frío intenso de otras zonas de Catalunya. La capital catalana vive un ambiente relativamente templado frente a los registros gélidos de la noche pasada.
Entre los municipios más fríos de este 20 de noviembre destacan Das (Girona), con la mínima más baja de –6,5 °C, seguida de Guixers (–3,9 °C) y Puigcerdà (–3,7 °C). Otras localidades como Molló, Bonabé, el Pont de Suert, Puig Sesolles, Sant Pau de Segúries, la Vall d’en Bas y Vic también han registrado valores negativos.
El frío persistirá hasta el sábado, pero el domingo se espera un ligero ascenso de las temperaturas. En Barcelona los termómetros subirán hasta los 14 °C de máxima y 8 °C de mínima, con cielos nubosos. El lunes podría llegar la lluvia y un nuevo repunte térmico, alcanzando los 17 °C de máxima y 11 °C de mínima.
Los pronósticos apuntan a que el frío regresará el próximo jueves, con máximas de 13 °C y mínimas de 9 °C en Barcelona bajo cielos despejados. Las alertas por frío y nieve siguen activas en las zonas montañosas.
