La playa de Sant Adrià de Besòs vuelve a estar abierta al baño esta temporada, después de haber permanecido cerrada desde mayo de 2021 por la presencia de residuos tóxicos en la arena. Un informe reciente de la Agencia de Residuos de Cataluña (ARC) confirma que el espacio ya no presenta riesgos para la salud pública.
La clausura se decretó hace cuatro años, cuando se detectaron metales pesados y contaminantes derivados de actividades industriales antiguas. Desde entonces, el Ministerio para la Transición Ecológica ha liderado complejos trabajos de descontaminación. Aunque los temporales de 2023 complicaron la recuperación al arrastrar nuevos residuos, finalmente se ha dado luz verde a la reapertura.
Este año, la playa vivirá su primera Semana Santa con bañistas desde su cierre. La reapertura amplía la oferta de litoral barcelonés justo al inicio de la temporada de baño, que se extenderá hasta el 5 de octubre con todos los servicios de salvamento y socorrismo activos.
La ARC, sin embargo, advierte: será esencial mantener una vigilancia ambiental constante para prevenir futuras contaminaciones. La recuperación de esta playa supone no solo una mejora en la oferta costera, sino también una victoria en la lucha por un litoral más limpio y saludable.