El Ayuntamiento ha aprobado el inicio del plan de reparcelación del ámbito de Prim, en el distrito de Sant Martí, que dará lugar a un nuevo vecindario con 3.610 viviendas, de las cuales 2.089 serán de titularidad pública.
Este nuevo barrio no solo aportará viviendas asequibles —1.889 de protección oficial y 200 dotacionales para jóvenes y personas mayores—, sino que se perfila como un espacio pensado para la vida comunitaria, con zonas verdes, una gran plaza, equipamientos educativos, sanitarios, culturales y deportivos, y una conexión directa con el parque del Camí Comtal y la futura estación de tren más importante de la ciudad.
La propuesta urbanística, nacida de un concurso de ideas y un proceso participativo, tiene un corazón simbólico: la masía de Can Riera, que se convertirá en el eje vertebrador del nuevo barrio. El diseño, firmado por el equipo de arquitectos Forgas, integra patrimonio, naturaleza y futuro en un mismo espacio.
Con esta apuesta, Barcelona refuerza su modelo de ciudad compacta, accesible y pensada a escala humana. La Sagrera ya no es solo una estación: es el punto de partida de un nuevo modo de habitar la ciudad.
