Desde el 30 de junio y hasta el 11 de julio, quienes tengan hasta 35 años y cumplan los requisitos podrán solicitar una ayuda mensual de entre 20 y 250 € para pagar su vivienda o habitación habitual.
Estas ayudas, que nacen como alternativa al Bono Alquiler Joven estatal, no se asignan por orden de llegada, sino por puntuación: se priorizarán las situaciones más vulnerables según criterios sociales y económicos. El objetivo es claro: aliviar la presión del alquiler y facilitar la emancipación juvenil en un contexto donde el acceso a la vivienda es cada vez más complicado.
La cuantía dependerá del esfuerzo económico que supone el alquiler respecto a los ingresos del solicitante. Además, quienes alquilen una habitación podrán presentar la solicitud de forma individual, sin tener en cuenta los ingresos de los convivientes.
Para acceder, es imprescindible estar empadronado en la vivienda, tener ingresos por debajo del umbral establecido y no pagar un alquiler que supere los límites fijados por zona geográfica. Las solicitudes pueden presentarse a través del portal tramits.gencat.cat o en oficinas de vivienda.
Una oportunidad que busca no solo ayudar a pagar el techo, sino también construir futuro.