Día de las mujeres trabajadoras solteras: una fecha para la independencia
Su origen se remonta a 2004, cuando el sociólogo estadounidense Thomas Rayner propuso reconocer la labor de las mujeres que construyen su carrera sin depender del estado civil. Hoy, más del 40% de ellas en países desarrollados eligen ese camino. En Japón, las empresas organizan actividades especiales, mientras que en Europa la tradición empieza a consolidarse. Para muchas, la soltería es una decisión consciente y no una carencia. Solo en 2023, el hashtag #LoneWorkingWomenDay superó el millón de menciones en redes.
Día de columpiarse: regreso a la infancia
Los primeros columpios datan de la antigua Grecia, pero la versión moderna de esta celebración nació en los países nórdicos. Más que un juego, mecerse ayuda al equilibrio, reduce el estrés y mejora el sueño, según estudios japoneses. En ciudades de todo el mundo, parques y plazas instalan columpios para adultos el 4 de agosto.
Día de la galleta con chispas de chocolate: un clásico accidental
Todo empezó en 1930, cuando Ruth Wakefield, dueña de una posada en EE. UU., añadió trozos de chocolate a su masa sin imaginar que había creado un icono. Desde 1987, el 4 de agosto es oficial: solo en EE. UU. se consumen ese día más de 500 toneladas de chispas. Durante la Segunda Guerra Mundial, estas galletas fueron símbolo de hogar para muchos soldados.
Día del baúl de los recuerdos: la memoria en objetos
La costumbre de guardar recuerdos en un cofre viene de los vikingos, pero el día moderno nació en 1995 en el Reino Unido. Revisar viejos objetos ayuda a ordenar la mente y recuperar vínculos emocionales. En Suecia, se acostumbra regalar a los niños un cofre vacío para empezar su propia colección. Museos de varios países celebran con exposiciones de reliquias familiares.
Un reflejo de la época
Estos cuatro festejos muestran distintas facetas de la vida: la independencia, la nostalgia, la dulzura y la memoria. Según encuestas, el más popular sigue siendo el de la galleta con chispas, con un 65% de menciones, aunque todos ganan terreno. El mensaje común: la vida es diversa y siempre hay motivos para celebrar.