Con los culés peleando por mantenerse en la parte alta de la clasificación y los mallorquinistas buscando consolidar su permanencia, el partido promete intensidad, estrategia y emoción desde el primer minuto. Los de Xavi Hernández quieren convertir el estadio de Montjuïc en un fortín y sumar tres puntos vitales ante su afición, mientras que el conjunto balear, sólido y combativo, aspira a dar la sorpresa en la capital catalana.
El ambiente será inmejorable bajo los focos de uno de los recintos más emblemáticos del deporte en Barcelona. Una cita que ningún aficionado al buen fútbol debería perderse. Todo listo para vivir una nueva noche de pasión blaugrana.