A las 9:00, la salida desde el Club Natació Sant Andreu marcará el inicio de un recorrido de 5 kilómetros que atraviesa algunos de los rincones más representativos del barrio, convirtiendo sus calles en una pista abierta para corredores habituales, debutantes y vecinos que salen a animar.
La carrera recorrerá la rambla Fabra i Puig, el carrer Gran, el carrer del Pare Manyanet, Josep Soldevila, el carrer del Segre, el passeig de Torras i Bages y el passeig Santa Coloma, para después regresar por las mismas arterias hasta el punto de partida. Un trayecto urbano, llano y muy rápido, pensado para correr a ritmo y disfrutar del ambiente comunitario que caracteriza al barrio.
Este año, la prueba llega con una novedad relevante: el circuito consigue por primera vez homologación oficial de 5K, un salto cualitativo que permitirá a los participantes acreditar tiempos oficiales y, a más de uno, buscar marca personal. También se mantiene la prueba júnior cronometrada, que convierte la mañana en una jornada familiar, con pequeños atletas empezando a descubrir el placer —y la tensión— de la línea de salida.
La Cursa de Sant Andreu sigue siendo fiel a su espíritu: deporte asequible, organización vecinal y un ambiente que mezcla competitividad sana con fiesta de barrio. Una carrera corta, pero con historia, que demuestra que cinco kilómetros bien corridos pueden convertirse en tradición.