Al pasear por el sereno claustro, te encontrarás con la antigua farmacia del hospital, un espacio que conserva con gran cuidado su mobiliario original y recipientes cerámicos que han sobrevivido el paso de los siglos. Uno de los puntos destacados de la visita es el ventanal de 1696, a través del cual se entregaban los medicamentos a quienes los necesitaban, un detalle que te transportará a otra época.
Esta experiencia de 60 minutos no solo es un viaje por la historia de la medicina, sino también una oportunidad para admirar un rincón poco conocido de Barcelona que alberga siglos de sabiduría y práctica farmacéutica. Disponible en catalán, castellano e inglés.