Bajo la dirección de Yaron Lifschitz, diez intérpretes extraordinarios desafían los límites físicos con saltos, escaladas, equilibrios imposibles y juegos de fuerza que se suceden con feroz temeridad. Vestidos con los diseños de Libby McDonnell y acompañados por los ritmos primarios e implacables del DJ Ori Lichtik, los artistas construyen un lenguaje escénico que es pura energía en movimiento.
Los lobos que emergen en escena oscilan entre el caos y la manada, entre la amenaza y la protección. Las coreografías, cargadas de intensidad, reflejan tanto la brutalidad del instinto como la belleza de la colectividad, creando imágenes que impactan por su crudeza y magnetismo.
«Wolf» no es solo un espectáculo acrobático, es una experiencia que conecta con lo más profundo y salvaje del ser humano. Un ritual contemporáneo donde cuerpo, música y riesgo se funden en una celebración de la libertad.