La obra parte de un hecho estremecedor: en una noche helada de diciembre, en algún lugar de Estados Unidos, el director ejecutivo de una gran corporación cae abatido. Las balas —marcadas con tres palabras inquietantes, Deny, Defend, Depose— desencadenan un terremoto mediático. En cuestión de horas, el joven autor del crimen pasa de ser un desconocido a transformarse en un héroe viral, proyectado por una sociedad que consume justicia, morbo y opinión a la misma velocidad.
Bajo la dirección de Carol López, el montaje desgrana cómo se fabrican los relatos colectivos y cómo la frontera entre información, juicio público y ficción se deshace en directo. La puesta en escena, diseñada por Jose Novoa y Lucía Romero Tovias, crea un ecosistema visual que dialoga con ese caos digital que todo lo amplifica. La iluminación de Marc Lleixà y el diseño sonoro de Lucas Ariel Vallejo acompañan un ritmo narrativo nervioso, casi hipnótico.
El elenco —Judith Forner Gallardo, Asier Gilabert i Ibáñez, Arnau Guillén i Carulla, Fidel Pallerols Rossell, Élida Pérez Lucena, Alba Roldán Gil, Andrea Sánchez i Sos y Carlos Ulloa Marín— interpreta una sociedad que observa, comenta, manipula y se deja arrastrar por la imagen más viral.
El resultado es un espejo incómodo donde vernos reflejados: un thriller teatral sobre cómo construimos héroes, cómo condenamos culpables y cómo, en el ruido constante, la verdad queda siempre en disputa.