La historia se centra en Vanessa, un espíritu travieso y carismático que se niega a aceptar su muerte. Su fantasma merodea por una casa en plena mudanza, un espacio que ha sido testigo de numerosos momentos y recuerdos. A medida que la familia que habita la casa se prepara para dejar atrás su antiguo hogar, Vanessa se esfuerza por asegurarse de que su legado permanezca y que la gente la recuerde como una persona única e insustituible. La familia, cada uno lidiando a su manera con la pérdida de Vanessa, se enfrenta a sus propios fantasmas personales: deseos no cumplidos, secretos guardados y relaciones complicadas.
La obra desde el humor y situaciones absurdas explora la complejidad de los recuerdos y el proceso de dejar ir y seguir adelante después de la pérdida de una persona cercana.