Su propuesta bebe de la teatralidad intensa y elegante de Kate Bush, pero avanza con la inmediatez del punk y una actitud ferozmente contemporánea. Canciones que se mueven entre la épica y la urgencia, interpretadas con una puesta en escena que no pasa desapercibida y que conecta de forma directa con el público.
El concierto forma parte de la programación de Primavera Tours, el ciclo que lleva el espíritu del Primavera Sound a las salas durante todo el año. Una cita especialmente recomendada para quienes disfrutan de propuestas como Wet Leg o CMAT y buscan nuevas voces que rompan moldes sin perder personalidad.
Razzmatazz se convierte así en el escenario ideal para ver de cerca a una de las bandas británicas más comentadas del momento, justo cuando su historia está a punto de dar un nuevo giro.