Integrados en el ciclo Constel·lacions, estos recitales buscan conectar el patrimonio musical con el público en un formato cercano y profundamente emotivo. A través de la interpretación en este espacio histórico, cada composición adquiere un nuevo respiro, rodeado de la vegetación exuberante y la arquitectura que dialoga con el pasado.
La programación se desgrana en dos jornadas:
- El 22 de marzo, a medio día, «Descubriendo a Dohányi» nos acerca a la figura del compositor con piezas selectas. Por la tarde, «Contrapunto y devoción» teje un entramado musical entre las obras de Bach y Pergolesi.
- El 23 de marzo, la mañana se abre con «Invitación al viaje», un recorrido por melodías que exploran horizontes sonoros lejanos. Al caer la tarde, «Reflejos nocturnos» envuelve al público en una atmósfera contemplativa y cargada de introspección.
Con cada nota tocada, los conciertos en el Invernadero prometen no solo música, sino una experiencia transformadora, uniendo el arte, la historia y la naturaleza en un evento memorable.